Hay muchas razones para hacerse vegano; salud, ecología o quizá por amor a los animales. Si estás considerándolo, te damos algunos datos que deberías saber.
Convertirse en vegano es como cambiar de religión: hay que regirse por normas y principios que no se limitan sólo a la alimentación –que, si lo piensas, ya es mucho–; sino que se modifica por completo el estilo de vida, empezando por la despensa y siguiendo con productos de cuidado personal, vestimenta, calzado, accesorios y más.
Brinda una ingesta baja en grasas y colesterol y un alto contenido de vitaminas y fibra, con la opción de obtener los nutrientes necesarios para el óptimo funcionamiento del cuerpo.
Es una alimentación que se basa principalmente en vegetales, cereales integrales, hortaliza, legumbres y frutos; a diferencia del vegetarianismo, se evita el consumo de derivados de origen animal tales como huevo, leche o miel.
Los más tradicionales no lo recomiendan debido a que puede ocasionar una descompensación nutrimental y desnutrición severa, si no se realiza de forma correcta. Resulta necesario estar bajo un control médico constante. Es por eso que muchos nutriólogos ofrecen la alternativa de orientar a la persona que quiere hacerse vegana en el cambio de hábitos.
Beneficios de una alimentación veggie que llevarán el placer a tu cama
En los últimos años, los deportistas han sido la mayor prueba de que se puede ser vegano sin afectar el rendimiento físico. Halteristas, corredores y hasta tenistas han expresado su apoyo a este tipo de alimentación.
Esta generación se ha dado cuenta del elevado costo ambiental y de salud que ha generado el consumo de productos de origen animal, por lo que más que una moda se ha convertido en símbolo de bienestar.
Aunque existen ofertas gastronómicas y opciones para conseguir comida y productos de vestir y calzar, es necesario hacer un gasto o inversión inicial. El rango de precios en restaurantes especializados es más o menos desde 15 pesos por un taco hasta $600 por una comida más en forma.