Alguna vez has escuchado el término nomofobia? Pues existe y muchos MUCHOS lo aplican a la perfección. Esta linda palabrita es la responsable de mucha soledad, traumas, rupturas amorosas y poco descanso de nuestro cerebro y organismo.
En términos generales, se refiere a la adicción a nuestro teléfono celular o mejor dicho, smartphoney haciendo promedios hablamos de una revisión del mismo entre 150 y 170 veces (en muchas ocasiones mucho más) de nuestro dispositivo.
Foto: elcomercio.pe
Toma unos segundos y analiza: ¿En qué momento del día ignoras tu teléfono? ¿Te das cuanta que esta contigo en la oficina, en el tráfico, en el baño y hasta en una cena romántica? No hay cosa que no hagas en él, en si se ha convertido en una parte de ti.
Por lo general, el 73% de los mexicanos al despertar (por cierto, con la alarma del smartphone) lo revisa de inmediato para ver si no hay novedades en Whatsapp o en sus redes sociales. Casi el 50% de personas consideran indispensable contar con su smartphone durante el día, llevándolos a regresar a su casa con la única intención de recogerlo en caso de haberlo olvidado.
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Ahora ¿Recuerdas tu infancia? No existía nada de eso y era padrísimo; nada como ir en bicicleta por tus amigos o saborear una tarde escuchando la radio. Eso ya no pasa realmente, en un mundo tan ocupado como el nuestro, la opción para entretener a los niños sin mayor esfuerzo es el -darles un teléfono- para que “no molesten”, cosa que a largo plazo tendrá consecuencias severas. A pesar de esto, ellos ya nacieron con la tecnología integrada…
Los jóvenes entre 15 y 30 años cuentan en una cifra superior del 40% el uso de smartphones.
Ahora, si hablamos de los serios problemas físicos que conlleva la adicción al celular encontraremos desde una severa afección del túnel del carpo hasta malestares en la vista. Siguiendo los problemas de la mente, esta enfermedad lleva a depresión severa, ansiedad y un terrible insomnio.
Cambiando el análisis, un 32% del horario laboral o de clases es ocupado por los usuarios para andar pendejeando en las redes sociales o en sitios de compra por internet, mismos que han adquirido mayor popularidad en la actualidad.
Relájate, un día pon atención al camino, a la gente y concéntrate en tu trabajo. Verás que no será necesario quedarte “horas extras” si en verdad te enfocas en trabajar. Si ves que el celular empieza a dominarte, no dudes en buscar apoyo psicológico. No minimices esto, te podría salvar de muchos problemas.