Mundanos no es una banda, sino una agrupación de artistas independientes conformada por Julieta Soto, José Riaza, Ismael Frausto, Ray Growl y Ángel Bermúdez.
Los músicos se reunieron por el placer de hacer música sin complicaciones, pretensiones o géneros predeterminados.
Tomando como punto de partida una mezcla de rock y el pop, este proyecto se despreocupa del destino adonde los lleve la creación. El quinteto se aboca a producir lo que les sale del alma, en busca de transmitir un mensaje que conecte con una audiencia cada vez más diversa y global. Tal es el caso de su primer sencillo, del mismo nombre.
¿Cómo empezó Mundanos?
A raíz de un proyecto llamado Hilo Negro en el que tocamos juntos 6 años y medio. Se desintegró el proyecto y cada quien regresó a sus respectivas vidas.
Luego José Riaza invitó a Ismael Frausto a grabarle unas guitarras a la canción llamada Mundanos. De ahí, Ismael notó que le hacía falta un bajo más poderoso e invitó a Ray Growl. Ahí surgió la idea de producirla de manera más creativa con Ángel Bermúdez.
Fue curioso porque en plena pandemia y a través de reuniones de Zoom, fue creciendo la canción de tal forma que sin haber estado juntos pudimos realizarla.
La voz de Julieta Soto fue la cerecita en el pastel.
¿Por qué Mundanos es una No Banda?
Las agrupaciones musicales generalmente son muy burocráticas. Regularmente siempre hay un líder que impone su voluntad.
En el caso de Mundanos, decidimos que no queríamos revivir experiencias pasadas. Decidimos hacerlo de manera libre, donde cada quien pudiera salir y entrar a la hora que quiera.
También que se escuchen todas las voces a la hora de tomar decisiones, que no solo sea la del líder. Inventamos el concepto de “No Banda”, que fuera un laboratorio o colectivo creativo.
¿Qué tan difícil fue producir mediante la red?
Hemos utilizado de todo para comunicarnos. La próxima canción que lanzaremos surgió de una nota de voz. No hay limites.
Actualmente existen tantas posibilidades para hacer las cosas que si no se hacen es porque no se quiere. La parte de una banda virtual es muy padre, donde se pueden hacer mil cosas, excepto ensayar. Pero grabar, producir y generar ideas, sí. Todo es posible gracias a los medios electrónicos.
¿Cuál es el mensaje que quieren transmitir?
Estamos en una época de separación en la que todo es negro o blanco. La canción se enfoca en la felicidad. Todos buscamos la felicidad por pequeña que sea: con un café en la mañana, cualquier cosa, ir a trabajar.
Es lo que nos une los unos con los otros, disfrutamos con la música.
¿Qué nos hacía felices? Tocar, cantar. Cuando nos despojamos de los likes, de la vida mediática, del ‘yo soy mejor que tú’, romper los roles o incluso intercambiarlos. Así podremos armar una gran familia con este colectivo.
¿Qué los hace diferentes?
Somos un colectivo artístico que cree en la filosofía del DIY (Do It Yourself). Todo lo que se produce es realizado por los integrantes, desde la composición y los arreglos hasta la la producción, la mezcla y la masterización de las canciones, que pueden ir desde un tema pop a un blues o una ranchera sin el menor prejuicio. Así es más divertido.
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¿Cuáles son los planes para Mundanos?
Queremos tener presencial virtual, haciendo canciones y videoclips. Una de nuestras metas es poder tocar en vivo. Lanzar otra canción y un vídeo, pero sin esa etiqueta de banda y sin seguir un plan en concreto que acabe posicionándonos como una banda. Queremos basarnos en el disfrute.