A Los Pericos les faltó lumbre en su asado
Teniendo rolas tan chidas, esta vez cambiaron el reggae por algo estilo Moenia. Sonaban bien pero parecían como una banda haciendo covers de ellos mismos.
¿Te acuerdas de 3000 Vivos? Pues esto fue lo contrario. El asado entre amigos de Los Pericos empezó bien, con “Mi Resistencia”, temazo que hace tiempo no escuchaba en vivo.
Bueno “en vivo”, es un decir por qué la cosa fue pregrabada. Ya sé, tanto ruido para esto.
Este video te puede interesar
Esperaba mucho, digo, desde hace días posteaban que la prueba de sonido, que se estaban preparando para algo íntimo, entre amigos y si, muy entre ellos, por qué nunca se dirigieron al público.
No me molesté tanto pero hubieras visto los comentarios, decían que estaba súper aburrido el show, “está más entretenido un partido de Pumas vs San Luis”, o cosas como “hasta en la pandemia, Ticketmaster nos ve la cara”.
Te lo juro, ¿qué les costaba mandar un saludito? ¡Algo para romper la cuarta pared! Admito que al final agradecieron por haberlos acompañado en la transmisión pero ¿sólo eso?.
https://www.instagram.com/p/CGa92x-la3g/?utm_source=ig_web_copy_link
Pericos con filtro
De por sí la pandemia nos está quitando la música en vivo, y de eso se trata este tipo de eventos, ¿no?; de acercarse, hacerlo lo más real posible, para recrear la euforia que se siente cuando los tienes ahí frente a ti, tan nítidos y el sonido no filtrado.
Con filtrado me refiero a que si un rasgueo sale mal o a Juanchi se le va la voz pues no hay manera de solucionarlo, a menos que sea playback. Así se sintió.
Por supuesto que la presentación se salvó por detalles como el último set: una habitación donde se notaba un ambiente acogedor, como si estuvieran jameando, algo más típico de ellos.
Tocaron versiones que sí sonaron a Los Pericos: “Complicado y aturdido”, “Salmo a Bob Marley”, “Casi nunca lo ves”, con esta cerraron.
Antes de eso, podías dejar la compu abierta e irte a hacer otra cosa porque realmente parecía un video de YouTube, donde la música se reproduce en aleatorio.
Lo que rescato, es la producción: escenarios bonitos, iluminación coqueta, pero de a ratos se les iba el audio o la imagen, a mí no me pasó pero algunos usuarios dijeron que por casi media hora no podían ver ni escuchar nada.
Ágora presenta Imperio en concierto digital
¿Electro reggae?
La primera locación estuvo increíble, se me olvidaba contarte que todo esto pasó en casa de Marcelo Blanco, ajá, es el percusionista. De hecho al inicio, él dio la bienvenida; con luz de día, explicó que se estaban alistando para el asado, mostró un poco el lugar y los sets donde tocarían en la noche, mientras los otros integrantes aparecían a ratos en la toma.
Te decía, la primera locación fue en el bosque: ellos al aire libre, esparcidos pero juntos, iluminados con foquitos. Muy lindo, tocaron la de “Waitin”, “Amandla” y “Mi flor”. Todo bien.
Después se pasaron a un rollo electrónico.
Lo mismo me pregunté yo.
Teniendo rolas tan chidas, esta vez cambiaron el reggae por algo estilo Moenia. Sonaban bien pero parecían como una banda haciendo covers de ellos mismos.
Después de un rato, cuando acabó el show, hicieron un streaming en Instagram, ahí solamente mencionaron los buenos comentarios, nada de quejas.
Si, tuvo momentos chidos, aunque dejaron un mal sabor de boca para los mexicanos y argentinos, se transmitió para estos países nada más.
En el video de Instagram, dijeron que van a hacer una presentación dedicada a los fans chilenos y que el próximo fin de semana, van a compartir contenido de lo que pasó en el backstage de este show.
Ah, cada vez que cambiaban de escenario, mostraban una explicación de cómo iba quedando el asado pero les faltó condimentarlo con buena vibra.